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El tabaquismo actualmente es una tendencia de moda ;generalmente los adolescentes inician este hábito por curiosidad, por influencia de los amigos, por rebeldía y para pertenecer a la sociedad.
Fumar es un hábito perjudicial que afecta gravemente la salud de las personas. Pero debemos recordar que los cigarros electrónicos y los pods de vapeo tienen el mismo efecto nocivo ; ya que contienen nicotina y otros aditivos.
La industria del tabaco comenzó en la década de 1700 y tuvo su mayor auge cuando se patentó la primera máquina para producir cigarrillos de papel en forma masiva en 1880, por lo que eran más fáciles de producir y distribuir.
La Nicotiana tabacum , es el tipo de nicotina presente en el tabaco de los cigarrillos . Cuando nuestro cuerpo se expone a la nicotina se estimulan las glándulas suprarrenales provocando una liberación de adrenalina .Está «oleada» de adrenalina produce una liberación inmediata de glucosa , así como también aumento de la frecuencia cardíaca ( taquicardia), aumento de la frecuencia respiratoria (taquipnea) e hipertensión arterial.
A nivel del páncreas se disminuye la producción de insulina lo que nos lleva a un aumento de la glucosa en sangre.
De forma indirecta la nicotina provoca la liberación de dopamina en las áreas de motivación y placer del cerebro, efecto similar que ocurre en las personas que consumen drogas como la heroína o cocaína ; experimentando una sensación sumamente placentera.De igual forma los usuarios se vuelven más tolerantes a la nicotina y necesitan dosis más altas para disfrutar de los mismos efectos placenteros.
La nicotina es altamente adictiva, si se consume con regularidad y luego se deja de hacerlo repentinamente se experimentan síntomas de abstinencia, que incluye antojos ,sensación de vacío, ansiedad, depresión, mal humor, irritabilidad, dificultad para enfocarse o poner atención.
Además de la nicotina ,el humo del tabaco contiene al menos 70 sustancias químicas que producen cancer .Entre estos químicos se encuentran: Ácido cianhídrico, aldehído fórmico, plomo, arsénico, amoniaco, uranio, benceno, monóxido de carbono, nitrosaminas, e hidrocarburos aromáticos policíclicos entre otras.
A continuación, desglosaremos cómo el tabaco daña el sistema cardiovascular y otros órganos de nuestro cuerpo.Exploraremos la naturaleza adictiva del tabaco, cómo se desarrolla esta adicción y las estrategias efectivas para superarla.
¿Cómo afecta el tabaco al corazón?
Ya está bien demostrado que la nicotina en el tabaco acelera la frecuencia cardíaca, produce vasoconstricción en las arterias principales y puede ocasionar alteraciones en el ritmo de los latidos del corazón produciendo arritmias cardíacas como taquicardia sinusal, fibrilación auricular o taquicardia supraventricular. Todo esto hace que el corazón se esfuerce aún más. Fumar produce hipertensión arterial, que a su vez aumenta el peligro de accidentes cerebrovasculares ,angina inestable e infarto agudo al miocardio.
Hay dos factores importantes por los que el tabaco provoca infarto del miocardio y/o angina de pecho:
- Nicotina.- Desencadena la liberación de catecolaminas (adrenalina y noradrenalina) que ocasionan disfunción endotelial, aumento de espasmo coronario, alteraciones de la coagulación, incremento de los niveles de LDL (colesterol malo) y reducción del HDL (colesterol bueno). La concentración de nicotina en sangre depende más del grado de inhalación que del contenido de esta sustancia en el propio cigarro.
- Monóxido de carbono.- Disminuye el aporte de oxígeno al miocardio, aumenta el colesterol y la agregación plaquetaria.
Daño a las arterias
Es secundario a la disfunción endotelial que se produce en los vasos sanguíneos . Además el aumento en la producción de LDL contribuye a la formación de la placa de ateroma endureciendo y estrechando las arterias en un proceso conocido como aterosclerosis, que puede reducir el flujo de sangre al corazón y aumentar el riesgo de un ataque cardíaco o un derrame cerebral.
El aumento de la presión arterial puede convertirse en un problema crónico y convertirse en un factor de riesgo cardiovascular para la aparición de una embolia cerebral o un infarto agudo al miocardio.La disminución del oxígeno en la sangre secundaria a la presencia de monóxido de carbono en el humo del cigarrillo reduce la cantidad de oxígeno necesaria para cumplir con los requerimientos metabólicos necesarios en nuestro organismo forzando a nuestro corazón a trabajar más duro.
El humo del cigarrillo favorece la formación de trombos o coágulos tanto por daño a nivel de la pared vascular como a nivel de la sangre.
La disfunción endotelial a nivel vascular , el daño oxidativo sobre las mitocondrias y la proliferación de células musculares lisas , el aumento de la agregación plaquetaria y la disminución de la expresión del inhibidor del factor tisular ,aumento de los niveles de fibrinógeno y el aumento en las viscosidad sanguínea promueven la formación de coágulos que obstruyen las arterias y producen isquemia miocárdica, infarto agudo al miocardio o embolia cerebral.
Otras enfermedades desencadenadas por el tabaquismo
Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC):
Fumar daña los alvéolos, las vías respiratorias y el revestimiento de los pulmones ; esto causa obstrucción del flujo de aire y problemas respiratorios. El EPOC produce enfisema o bronquitis crónica.Los síntomas pueden ser tos productiva con esputo, problemas para respirar, sibilancias y fatiga.
Cáncer:
El tabaquismo aumenta el riesgo de cáncer de pulmón 5 a 10 veces que en las personas que no fuman, también está relacionado con el cáncer de boca, faringe, laringe, esófago, estómago, páncreas, cérvix, riñón y vejiga, así como con las leucemias mieloides agudas.
Enfermedades gastrointestinales:
El tabaquismo produce daños a nivel de la mucosa, alteraciones en la irrigación del tejido y cambios en la respuesta inmune. Empeora los síntomas y las lesiones esofágicas provocadas por el reflujo gastroesofágico, incrementa el riesgo de aparición de la úlcera de estómago y duodeno. En caso de que el paciente tenga úlcera de estómago y duodeno existe mayor riesgo de perforación, hemorragia o estenosis.
Problemas óseos:
El tabaquismo disminuye la absorción de calcio, el cuál es importante para la mineralización de los huesos , lo que contribuye a la osteoporosis.
Problemas en la visión:
Los pacientes que fuman tienen el doble de probabilidad de desarrollar degeneración macular destruyendo la visión central y aguda, lo que finalmente dificulta la lectura y la visualización de detalles finos Además, daña el nervio óptico produciendo pérdida de la visión periférica y afectando la capacidad para ver objetos en los bordes del campo visual.
Favorece la formación de cataratas lo cual produce visión borrosa y hace que los colores se vean opacos, desteñidos o amarillentos.
La adicción al tabaco: ¿Por qué es tan difícil dejar de fumar?
La nicotina, es la sustancia que causa adicción, liberando dopamina en las áreas de motivación y placer del cerebro.
Con el tiempo, la nicotina cambia la forma en que funciona tu cerebro y le da la sensación de que necesita nicotina tan solo para sentirse bien.
Superando la adicción al tabaco
Para dejar de fumar se debe superar dos desafíos importantes:
- Acostumbrar a tu cerebro a estar sin nicotina.
- Acostumbrarse a no tener cigarrillos en sus rutinas diarias.
Cese del hábito de fumar:
Dejar de fumar es el paso más importante. Muchos encuentran útil establecer una fecha para dejar de fumar y prepararse mentalmente para los desafíos.
Apoyo profesional y grupos de apoyo:
Consultar a un médico sobre terapias de reemplazo de nicotina, como parches, chicles o medicamentos recetados puede ser muy beneficioso. Unirse a grupos de apoyo también puede proporcionar la motivación y el apoyo emocional necesarios.
Cambios en el estilo de vida:
Mantenerse activo, comer saludablemente y evitar situaciones que inciten a fumar son pasos clave para superar la adicción.
Terapia conductual:
Trabajar con un consejero o un psicólogo puede ayudar a desarrollar estrategias para manejar los antojos y modificar los comportamientos relacionados con el hábito de fumar.
Hay dos medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. para dejar de fumar que vienen en forma de pastilla: la vareniclina y el bupropión.
Conclusión
Recordemos que la nicotina no solo está presente en los cigarros , sino que también en los cigarrillos electrónicos y pods de vapeo.
Debemos entender que el daño que el tabaco causa al sistema cardiovascular y otros órganos generalmente es irreversible .Y es importante reconocer de forma temprana la naturaleza adictiva de la nicotina es un paso crucial para realizar un plan hacia la recuperación. Con las estrategias adecuadas y el apoyo necesario, dejar de fumar y mejorar la salud del corazón es totalmente posible.